Un análisis comparativo entre las principales ciudades de Latinoamérica sobre las actuales condiciones viales nos revela las oportunidades y retos que tenemos en nuestra ciudad para enfrentar su crecimiento, logrando conjugar lo urbanístico con lo económico, con un adecuado desarrollo de la infraestructura vial y el reordenamiento del transporte público, apuntando a generar una cultura del cuidado del medio ambiente y mejoras en la productividad personal y empresarial de sus ciudadanos, amalgamando todos estos aspectos en torno a una lógica obvia y simple: priorizar primero al peatón, en seguida al ciclista, luego el bus o tren y finalmente el auto privado.